Aunque la historia es de muchos conocida, merece la pena recordarla como nuestro particular homenaje a las víctimas, en este 10 aniversario del atentado del 11S en las Torres Gemelas de NY:
Milton Glaser diseñó gratuitamente en 1977, para el estado de Nueva York, lo que después de un tiempo llegó a ser símbolo y emblema de la cuidad. Trazos claros y sencillos llenos de fuerza y de vida, una historia, un mensaje, millones de aplicaciones, de imitaciones de emociones.
Cualquier diseñador daría lo que fuera por crear algo parecido, o lograr que el curso de una de sus creaciones tomara los mismos caminos que este dibujo del diseñador gráfico neoyorkino, hecho en un sobre blanco en el asiento trasero de un taxi. Glaser, que nació en 1929, ha sido recientemente entrevistado por el Magazine de El Mundo al que revelaba: «Mi diseño tenía una sensación de inevitabilidad. Forma y contenido estaban unidos de manera tal que no se podían disociar». La unión de formato y contenido del mensaje, palabras clave en todos los campos del diseño y la comunicación, será lo que responda a la identidad de una marca, de un producto y le de consistencia. La credibilidad del diseño pasa por la coherencia y su armonía interna y externa. Efectivamente hay mucho de cultura popular, de estados, de ciudades, de sus habitantes: unión de pensamientos y sentimientos en este y otros logos de éxito en el siglo XX, que han marcado hitos en la historia del diseño.
I Love NY nació fruto de una crisis de la gran cuidad, de manos de un americano formado en Bolonia, con una tipografía cargada de amor a su patria: American Typewrite. Para contemplar el logo original (valorado como un pequeño Picasso) tendremos que visitar el Moma en NY.
Os dejamos a vuestra curiosidad descubrir qué hizo Milton con su logo tras los atentados del 11S y el co-branding con las aerolineas Jet Blue.
Este es Milton Glaser: